Undués de Lerda a Monreal 17-5-2016

Hoy el destino no está claro. Pretendíamos ir hasta Izco, en Navarra, pero Pedro nos comentó anoche que estaría cerrado hoy. Así que decidimos sobre la marcha que haremos nueve kilometros más y pararemos en Monreal.

Desayunamos en el albergue tempranito. Hoy hay casi 40 km de camino. Además, hemos de parar en Sangües para repostar dinero contante y sonante. 

Aprovechamos que en el albergue hay una máquina de cafés para hacernos un café con leche. Las tostadas y la mermelada que cogimos ayer del desayuno en Artieda nos permiten completar un poco decentemente. En Sangüesa se puede comprar para el resto de la etapa.

Salimos por camino rural que va descendiendo.

El sol aún no es visible, aunque es un dia claro. Sólo alli al fondo, sobre la sierra se ven unos acumulos nubosos.

Por lo demas, el paisaje a esta hora tiene otras tonalidades mas matizadas. Y los gorriones están más activos

El camino, que discurre entre arbustos, a lado y lado tiene campos de trigo. Se aprecia un suave aroma a maría. Según parece alguien ha madrugado más que nosotros.

El sol comienza a dibujar nuestra alargada silueta sobre en camino de tierra.

Entramos en Navarra por camino rural.

De nuevo grandes extensiones de trigo y cebada

Se entra en Sangüesa por una carretera rural. Al fondo las colinas pobladas en sus cimas de molinos generadores de energía eólica, cual cruces de mayo.

La salida de Sangüesa se hace por un puente de hierro que cruza el rio Aragón.

Pep, el chivo de Vilafranca que camina con su hijo Pau, nos aconsejó que tomásemos la alternativa que se abre a partir de Sangüesa por la Foz de Lumbier

Llama la atención, sobre manera, a la salida de Sangüesa, unas instalaciones industriales inmensas. Sr trata de la papelera Smurfit Kappa. Miles y miles de troncos. montañas de madera troceada. Camiones y camiones esperando para descargar. Impresionante.

Almorzamos poco más adelante, junto a unas instalaciones deportivas..bocata de salchichón. 

La carretera sigue el curso del río Aragón. Es la NA2420. Pero ni rastro de la Foz de Lumbier. Tan bonita como me la han descrito y yo sólo veo carretera, carretera y más carretera.

Cambios en rotondas, pérdida del norte, google maps, en fin... Y, finalmente, un Guardia Civil de tráfico nos indica cómo llegar a Izco por carretera.

Me voy "acordado"de Pep de Vilafranca. El hecho de caminar por carretera agota psicológicamente. Pero es que, además, bebes más y necesitas más. Vamos con el agua justa. Sin comer. Y son ya casi las cuatro de la tarde cuando, por fin, llegamos a Izco.

A la entrada encontramos una fuente, que dejamos seca... Jejeje.

Allí reencontramos a Mike, el moscovita, que había ido por la vía de Roqueforte.

Izco está cerrado. Ni un alma en el pueblo. El albergue y el bar cerrados. Ufff

reemprendemos la marcha en dirección a Monreal. Mike va a toda galleta. Así que, casi a la segunda curva, ya nos ha dejado atrás. Mike se había levantado e iniciado la marcha antes que nosotros en Undués.. Jejeje. Lo pillais?

Poco después de Izco nos alcanza Jose, el alicantimo, con el que continuamos la marcha hasta Monreal.

El final de etapa está siendo especialmente duro. No por la orografía, sino por el desespero y el sol de justicia que está cayendo.

Me viene a la mente una de mis canciones favoritas. Una canción que siempre ha elevado mi moral. Podríase decir que es mi canción. "El sueño.imposible"

Con fe lo imposible soñar 

al mal combatir sin temor 

triunfar sobre el miedo invencible 

en pie soportar el dolor 

Amar la pureza sin par 

buscar la verdad del error 

vivir con los brazos abiertos 

creer en un mundo mejor 

Es mi ideal 

la estrella alcanzar 

no importa cuan lejos 

se pueda encontrar 

luchar por el bien 

sin dudar ni temer 

y dispuesto al infierno llegar si lo dicta el deber 

Y yo sé 

que si logro ser fiel 

a mi sueño ideal 

estará mi alma en paz al llegar 

de mi vida el final 

Será este mundo mejor 

si hubo quien despreciando el dolor 

combatió hasta el último aliento 

Con fé lo imposible soñar 

y la estrella alcanzar.

Tras pasar por las Salinas de Ibargoiti, tomamos un sendero de tierra, en el que la sombrita nos acompaña, durante dos kilómetros, hasta casi la entrada de Monreal. La verdad es que se agradece acabar así una etapa tan larga, habida cuenta de lo desabrido del recorrido elegido.

Finalmente, llegamos a Monreal. La entrada la hacemos por el campo de futbol cubierto de césped y margaritas. Tras éste, un puente viejo de piedra nos permite atravesar un rio que, sonoro, baja con fuerza.

Monreal es un pueblo característico del agro navarro. Impresiona el pedazo de frontón qye tienen nada más entrar al pueblo. Pero impresiona más aún pasear por sus calles estrechas entre casas de piedra.

Verdaderamente un lujo poder descubrir parajes como este.

Antes de llegar, habíamos contactado con Charo, la persona que hace de alberguera, además de llevar el bar del Centro Parroquial.

Nos dice que ella no estará cuando lleguemos, pero está abierto y nos podemos instalar cuando lleguemos. Así lo hacemos.

En el albergue nos jintsmos quince peregrinos. Volvemos a encontrar a peregrinos con los que habíamos compartido estancia en Arrés. Los dos chicos gaditanos, para los que hemos pasado inadvertidos. Tomás con quien tenemos una conversación interesante. Vasco él. Max, más vasco todavía, con el que compartimos una cerveza y una charla acerca de los quesos, los vinos, y vete tu a saber qué más... lo que son los vascos vaya!!!

En el Centro Parroquial conozco también a Moníque y Michel, franceses. Ella no habla nada. Él por los codos. Banquero tolosano retirado que me explica, en francés, las veces que ha dado la vuelta al mundo y su pasión por viajar. Una persona muy muy agradable.

A media tarde llegan Carlos, Pep de Vilafranca y su hijo Pau.

Con todos ellos compartimos, además de la cena en el Centro Parroquial, conversaciones de gentes de diferente procedencia y que hablamos un mismo lenguaje, el lenguaje del corazón.

Gente entrañable que guardaré en mi corazón para siempre. Seguro que nos volveremos a encontrar en el Camino.

Otro día entrañable que anotar en mi agenda.

Para mañana habrá separación, mi compadre y yo hemos planificado ir a Tiebas en lugar deir hasta Puente la Reina, como el resto. Para nosotros será un día de descanso, además de tratar de encontrar albergues menos masificados.

RECORRIDO: el recorrido que hemos seguido no es el correcto. Fácil en cuanto a altimetrías, pero muy desangelado por cuanto la mayor parte la hacemos por carretera.

CLIMATOLOGÍA: dia claro, limpio y con una temperatura inicial muy agradable. A medida que avanza el día el calir arrecia un poco, nada del otro mundo. En el tramo final el calor se nota más debido al trazado seguido sin sombras, a la falta de agua y qye son 42 km

ALBERGUE: en muy buenas condiciones. Diez literas dobles y dos camas individuales con taquillas, todo en la misma sala superior. Sala de estar comedor con todo lo necesario. Lo mejor de todo Charo. Una crack que nos ha atendido a la perfeccion, a pesar de ser unos cuantos.