Tàrrega a Linyola 5-5-2016

Hoy hace 59 años que vine al mundo. La verdad es que me lo he pasado bien desde entonces.

Nadia continúa durmiendo. Así que decidimos no despertarla para despedirnos. Dejamos una nota : "BON CHEMIN NADIA. Ultreia".

Reiniciamos camino desde Tàrrega después de un desayuno espectacular en el mismo albergue en que hemos pasado la noche. Esther, la responsable del turno de día del centro nos despide amablemente, igual que nos han tratado en todo momento.

Dejamos atrás la parroquia de Santa María del Alba, una iglesia preciosa, para iniciar el desvío hacia Linyola.

Seguimos las señales hasta alcanzar un camino rural de tierra que nos conduce a través de campos de verde cereal y oliveras. 

Aquí los reyes son los conejos de campo.

 

A medida que nos acercamos a Tornabous vamos encontrando las características plantaciones de frutales. Pera, manzana... Filas y filas infinitas de frutales

Ya en Tornabous, preguntamos por una panadería. En ella compramos una barra de pan y cuando pedimos que nos cobre nos dice Nanci, la panadera: "l'avi sempre em dèia que quan passesin pelegrins els donés el que vulguésin sense pagar. I això faig". No bastante con eso, nos ha regalado una coca de forner que sabe a gloria. Y aún más, quería hacernos el bocadillo ella. Ves per on el que té el Camí.

Mira como son las cosas. Nanci, la chica que nos ha atendido de esta manera tan generosa, resulta que es el amor platónico de infancia de Jaume... ¿Os acordáis que hablamos de él desde Castellolí?

Hoy de celebración por todo lo alto. Un pedazo de coca de forner que no se lo salta un galgo.

A partir de Tornabous vamos siguiendo una pista rural a veces de tierra a veces asfaltada. Atravesamos La Fuliola y Boldú con campos y campos de frutales a lado y lado del camino. Salpicados por campos sembrados de cereal.

A medida que avanza la mañana el sol se hace menos amigable. Hoy la brisa fresca que nos traían los alisios no aparece. Me cachis en los alisios.

 Se puede observar que ya comienzan la recolección de algunos sembrados de cereal. Creo que debe ser el que utilicen de forraje para el ganado ya que aún está verde. 

Al llegar a Castell del Remei, llama la atención el cambio de cultivo. A lado y lado del camino se extiende no más de media hectárea de viñedo. Pero de viñedo de vino bueno bueno. Estoy convencido que pertenece a los Franciscanos. Ellos si que saben.

Hacemos una paradita para tomar un platanito y un chupito de agua. Y a continuar el poco trecho que nos queda hasta Linyola, la tierra de Bojan Kirkich el nen de Linyola. Jejeje

Una vez llegados, nos ponemos en contacto con Josep Caba, un particular altruista que cede una nave para acomodar a peregrinos. Está en Pont de Suert. Ufff.

Pero de qué pasta estará hecha esta persona que aún estando él fuera se preocupa de dejar el encargo a su hija, que regenta la floristería del pueblo, para que nos atienda.

Mireia, la hija de Josep Caba, nos explica que su padre hizo el camino y, en agradecimiento, después ha dedicado parte de su propiedad a albergar a los peregrinos que hagan noche en Linyola.

Que es de una pasta especial no cabe duda. Y tan es así que se lo ha transmitido a Mireia, que un poco azarada nos comenta que lo que ofrece es poca cosa, que no esperemos grandes instalaciones.

Tendríais que ver lo que pone a disposición de quienes solicitamos albergue. 5 camas bajeras, dos grupos de 8 taquillas, una sala con mesa, sillas, nevera, microondas, cocina, fregadero,  cuarto de baño completo con agua caliente.... Y todo lo más necesario. Increíble.

Mireia, que ha de marchar, deja a su hijo Ivan para que nos atienda en lo que necesitemos. Ivan nos ha explicado de pe a pa...

Ha sido entonces cuando he visto que Marta, aquella chica con la que habíamos coincidido en Montserrat ¿os acordáis? Si hombre si. La pareja de Ramiro, el buzo que nos ha de "coger" los percebes en Santiago. Pues bien, Marta se ha dejado las chanclas.

De verdad que esta gente de Linyola son gente muy muy especial. En su cuaderno de notas, que pone a disposición de los peregrinos, dejo escrito: "Dejo en tu casa polvo del camino, que espero me devuelvas en inverso sentido".

He convenido con Ivan que en cuanto concluyamos el viaje volveremos a su casa a tratar de recuperar unos datos de un disco que se le ha escoñao y a mirar qué podemos hacer por su portátil más escoñao aún.

Duchaditos y hecha la colada hemos comido, con celebración chupitera incluida, en l'Ateneu de Linyola. Perfecto.

Después de un ratito de relax en el albergue hemos salido a comprar algo de fruta y a buscar gel ..que me lo dejé en Tàrrega.

Finalmente, hemos decidido jugar al parchís y decirnos...:"de Ateneu a Ateneu y me cuento veinte" Así que hemos repetido la experiencia en l'Ateneu de Linyola. Jejeje

Y así de pesao es el camino.

RECORRIDO: un recorrido muy agradable en general, predominando el paisaje agrícola. Muy plano. gran parte de pista de tierra y parte asfaltado. Aunque nada sombreado en todo el trayecto.

CLIMATOLOGIA: Día soleado de temperatura muy agradable al inicio de la jornada pero ha ido haciéndose más calurosa, a medida que ha ido avanzando la mañana. A partir de las 12 el calor se notaba intensamente, sudando copiosamente. Hoy hemos necesitado repostar agua en varias ocasiones.

La brisa fresca que nos había acompañado en jornadas anteriores hoy ha desaparecido.

ALBERGUE: Una propiedad particular que cede gratuitamente una nave con 5 camas bajeras, dos grupos de 8 taquillas, una sala con mesa, sillas, nevera, microondas, cocina, fregadero,  cuarto de baño completo con agua caliente.... Y todo lo más necesario.